En la temprana infancia el trauma puede cambiar cómo se desarrolla un niño. Esto incluye:
- memoria
- atención
- pensamiento y lenguaje
- conducta
Por ejemplo, el niño puede estar retrasado en comparación con otros niños en áreas como aprender a hablar, seguir instrucciones, prestar atención, adaptarse a nuevas situaciones, calmarse, gatear o caminar.
El niño quizás tenga miedo y sienta que el mundo es peligroso. Quizás no sepa conseguir lo que necesita de una manera apropiada. Puede que tenga un berrinche, dé golpes, muerda o llore.