Uno de los aspectos clave de la Ley de Prevención del Tráfico Sexual y Fortalecimiento de las Familias de 2014 es darle poder a los padres de acogida temporal para tomar decisiones que le den a los jóvenes bajo cuidado del estado más control sobre sus propias vidas. Sin embargo, los cuidadores pueden minimizar los riesgos usando “estándares de padres razonables y prudentes” y haciendo las preguntas correctas.
La crianza razonable y prudente significa demostrar un juicio razonable, habilidades y precaución.
Para poner en práctica el estándar de crianza razonable y prudente, debe:
- Conocer al niño o a la niña.
- Entender los factores clave relacionados con la actividad.
- Tomar decisiones según cada caso.
Bajo este estándar, los cuidadores toman decisiones diarias sobre las actividades que los niños pueden y quieren realizar. Los beneficios incluyen:
- Es más probable que los niños puedan participar en una actividad normal si obtienen permiso de inmediato.
- Los cuidadores, quienes son los que mejor conocen a los niños, toman decisiones que afectan las vidas de estos.